Un grupo de ocho organizaciones centradas en el medio ambiente han hecho un llamamiento a diferentes agencias gubernamentales bajo la administración Biden para que apliquen nuevos enfoques en respuesta a las operaciones de Proof-of-Work y otras operaciones de minería de criptomonedas.
En una carta dirigida a la Oficina de Política Científica y Tecnológica de los Estados Unidos el lunes, el Grupo de Trabajo Ambiental, Earthjustice, Greenpeace, la Liga de Votantes por la Conservación, el Club Sierra, Amigos de la Tierra, el Guardián del Lago Séneca y el Guardián del Río Milwaukee instaron a la Casa Blanca a promulgar políticas destinadas a frenar «el uso de electricidad y la contaminación climática asociada a las monedas digitales que dependen del modelo PoW». En concreto, las organizaciones alegaron que la minería de criptomonedas en Estados Unidos perjudicaba a las comunidades al crear una creciente demanda de electricidad procedente de combustibles fósiles, amenazaba las cadenas de suministro con la demanda de chips para los rigs de minería, creaba importantes residuos electrónicos y no «ayudaría a la transición a la energía renovable».
El grupo de ocho propuso que la Agencia de Protección Ambiental sometiera a las empresas de minería PoW a «revisiones estrictas» en torno a los permisos de operación «para mitigar los daños de la eliminación de residuos electrónicos de la minería de criptomonedas en grandes cantidades», así como para abordar las quejas de contaminación acústica supuestamente causadas por los rigs de minería. Además, solicitaron a la Oficina de Información y Asuntos Regulatorios de la Oficina de Gestión y Presupuesto la creación de un registro para muchas operaciones de minería PoW en un esfuerzo para que las empresas «revelen sus fuentes y cantidades de energía consumida».
Otras recomendaciones incluyen que el Departamento de Energía implemente normas de eficiencia energética para los mineros de PoW, con un límite más estricto con el tiempo «para finalmente eliminar» la minería proof-of-work. Sin embargo, la mayor petición parecía dirigirse a la Comisión de Bolsa y Valores y a la Comisión de Negociación de Futuros de Productos Básicos, solicitando a los reguladores financieros que limiten los exchanges de criptomonedas a la cotización de activos digitales que cumplan ciertas «normas medioambientales y de electricidad», así como que se opongan a las «afirmaciones engañosas sobre el impacto medioambiental de las monedas digitales».
«Exigir a los exchanges registrados que sólo incluyan activos digitales cuyas transacciones consuman electricidad por debajo de un determinado estándar de eficiencia energética impulsaría la innovación o la transición a otros métodos de validación», afirman los grupos ecologistas.
A medida que el espacio de las criptomonedas sigue creciendo con muchos inversores en los Estados Unidos, los líderes de la industria y los legisladores han dado un paso adelante para abordar las cuestiones relativas a los riesgos financieros, así como el posible impacto en el medio ambiente de la minería de Bitcoin (BTC). En abril, un grupo de 23 miembros de la Cámara de Representantes envió una carta a la EPA diciendo que la «creciente industria cripto debe rendir cuentas»; alegando que «la minería de la criptomonedas está envenenando nuestras comunidades».
El Bitcoin Mining Council respondió con su propia carta escrita por el CEO de MicroStrategy, Michael Saylor, al administrador de la EPA, Michael Regan, el 2 de mayo, afirmando que el grupo de legisladores se había equivocado en varias cuestiones clave. El líder de la industria situó el supuesto error en las «instalaciones generadoras de energía» que causan la contaminación, no en la minería de BTC en sí.
Certain members of Congress sent a letter to the EPA premised on several misperceptions about #Bitcoin mining. We have authored a response to clear up the confusion, correct inaccuracies, and educate the public.https://t.co/Ks6fh9Cg0Z
— Michael Saylorâš¡ï¸ (@saylor) May 2, 2022
El gobierno del estado de Nueva York está estudiando un proyecto de ley que podría prohibir durante dos años que todas las nuevas instalaciones mineras de PoW del estado utilicen combustible basado en carbono para alimentar sus operaciones. Tanto el Sierra Club como Seneca Lake Guardian se han opuesto a las operaciones de la empresa minera Greenidge Generation Holdings en el lago Séneca del estado.
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