El Comité de Supervisión Bancaria de Basilea del Banco de Pagos Internacionales (BPI) publicó el 17 de octubre un documento de consulta en el que propone obligar a los bancos a revelar su exposición a las criptomonedas.
El Comité de Basilea está formado por bancos centrales y autoridades financieras de 28 jurisdicciones y es un foro para la cooperación reguladora en materia de supervisión bancaria. El último documento de consulta se basa en las directrices de divulgación de la norma prudencial last sobre cómo los bancos deben manejar su exposición a los criptoactivos publicada en diciembre de 2022.
El documento de consulta centrado en la exposición de los bancos a los criptoactivos tiene como objetivo establecer una «tabla de divulgación y un conjunto de plantillas estandarizadas para la exposición de los bancos a los criptoactivos» con una fecha de implementación propuesta para el 1 de enero de 2025. El Comité de Basilea ha abierto la propuesta a comentarios públicos hasta el 31 de enero de 2024, cuyos resultados se publicarán en el sitio net del BPI.
En virtud de la nueva normativa propuesta, los bancos tendrían que facilitar datos cuantitativos sobre las exposiciones a los criptoactivos y los correspondientes requisitos de money y liquidez. Los bancos también estarían obligados a ofrecer datos cualitativos sobre sus actividades vinculadas a las criptomonedas.
Además, los bancos deberán ofrecer información sobre las clasificaciones contables de las exposiciones que tienen a los criptoactivos junto con los pasivos. En su propuesta, el comité señaló que el uso de un formato uniforme de declaración fomentará la aplicación de la disciplina de mercado y reducirá la asimetría de información entre los bancos y los participantes en el mercado.
El Comité de Basilea también revisó el tema de los criptoactivos y la exposición de los bancos en junio de este año. En aquel momento, el comité no profundizó en el tema, mencionando únicamente que se estaban centrando en blockchains sin permiso, así como en los criterios de elegibilidad para las stablecoins del «Grupo 1».
El BPI ha participado activamente en consultas sobre criptomonedas y ha estudiado el aspecto normativo de la tecnología descentralizada. Anteriormente, en la primera semana de octubre, el BPI y un puñado de bancos centrales europeos estaban trabajando para desarrollar un sistema de seguimiento de los flujos internacionales de criptomonedas.
Sigue leyendo:
Aclaración: La información y/u opiniones emitidas en este artículo no representan necesariamente los puntos de vista o la línea editorial de Cointelegraph. La información aquí expuesta no debe ser tomada como consejo financiero o recomendación de inversión. Toda inversión y movimiento comercial implican riesgos y es responsabilidad de cada persona hacer su debida investigación antes de tomar una decisión de inversión
Las inversiones en criptoactivos no están reguladas. Es posible que no sean apropiados para inversores minoristas y que se pierda el monto total invertido. Los servicios o productos ofrecidos no están dirigidos ni son accesibles a inversores en España.